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La carboxiterapia y sus múltiples beneficios
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Imperfecciones en la piel como la celulitis o las estrías, son uno de esos problemas que aunque no generan daños en nuestra salud, si nos causan inseguridades, las cuales nos acomplejan a la hora de vestir determinadas prendas o incluso para ir a lugares específicos, como playas o piscinas, en donde el bañador es la norma.
Este tipo de problemas no siempre puede ser solventado con una buena dieta alimenticia y ejercicio, a veces es necesario realizar alguna ayuda extra. Para nuestra buena suerte, el mundo de la estética cuenta con muchos procedimientos ideales para esto, como es el caso de la carboxiterapia, técnicas innovadora en donde se utiliza el Dióxido de Carbono (CO2) como elemento.
Aunque este tratamiento es relativamente nuevo dentro del mundo de la estética, tiene varios años de uso en la medicina general, sobre todo en lo que se refiere a la atención del dolor crónico, ya que se ha comprobado la efectividad de la terapia para aliviar la tensión muscular y reducir el grado de dolor que puede padecer una persona por diferentes causas.
Las terapias con CO2 dentro del mundo de la estética no paran de crecer en popularidad y es que cada día se descubre un nuevo uso y beneficio.
¿Qué es la Carboxiterapia?
Este procedimiento cosmético consiste en la inyección de Dióxido de Carbono en los tejidos subcutáneos, mediante pequeñas inyecciones y puede ser aplicada sola o combinándola con la Mesoterapia, terapias láser, entre otras.
Generalmente la Carboxiterapia se utiliza para combatir el exceso de grasa corporal, eliminar la celulitis, combatir el envejecimiento facial y corporal, la flacidez, las micro venas varicosas y ayuda a reducir cicatrices y estrías.
Su objetivo principal en el mundo de la estética es estimular la perdida peso y cada día se convierte en una buena alternativa de la Liposucción.
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Un procedimiento versátil
Como tratamiento postoperatorio de la Liposucción o de las cirugías estéticas, la Carboxiterapia corrige las irregularidades de la piel, previene la fibrosis y mejora los resultados.
El Dióxido de Carbono es la base de este tratamiento, debido a que libera diferentes sustancias tales como la serotonina, catecolaminas, histamina y bradiquinina, quienes estimulan a los receptores encargados de destruir la grasa.
Cuando entra el CO2 en el cuerpo, aporta nutrientes que mejoran el flujo de la sangre, la presión del gas destruye las células grasas y aumenta el colágeno, consiguiendo mejorar la calidad del tejido y la piel se vuelve mucho más tersa y lisa.
El uso de la Carboxiterapia es común en las ramas de la Reumatología, Angiología, Urología y Dermatología, ayuda a diferentes patologías de la piel y se puede utilizar para eliminar problemas de:
- Acné. No solo reduce los síntomas, sino que puede ayudar a afinar las cicatrices que aparecen posteriormente.
- Várices. Lo cual es una buena noticia para aquellas personas que pueden llegar a sufrir tensión en la zona afectada.
- Bolsas en los ojos. En este caso, el efecto es mayor cuando las bolsas no están muy pronunciadas.
- Ojeras. Una forma efectiva de rejuvenecer el contorno del ojo.
- Celulitis. Independientemente de su gravedad, se puede ver una mejora.
- Flacidez. Una forma poco invasiva de tensar la piel.
- Estrías. Sobre todo cuando estas tienen un aspecto rojizo.
- Grasa localizada. No confundir con un procedimiento para bajar de peso en caso de obesidad.
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Beneficios principales de la carboxiterapia
Cabe resaltar que esta técnica es muy efectiva, pero se considera complementaria y no definitiva. Sin embargo, favorece el aumento de oxígeno y nutrientes de la piel, incrementa la producción de colágeno y elástica, dando un efecto tensor y reafirmante.
Las sesiones de carboxiterapia tienen una duración alrededor de 45 minutos, se recomienda beber abundante agua posteriormente a su aplicación, para ayudar al cuerpo a eliminar las toxinas y depurar el gas.
Se recomienda también, como en la gran mayoría de tratamientos estéticos, seguir una dieta equilibrada y realizar ejercicios para mejorar los resultados. En algunas ocasiones se puede presentar un poco de hinchazón, rojeces y dolor, algunos pacientes presentan sensación de hormigueo frío o caliente y/o pesadez o malestar en la zona.
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Contraindicaciones del tratamiento
La Carboxiterapia es para pacientes que gocen de buena salud, no se puede aplicar a personas con síntomas de resfriado tales como fiebre, tos, dificultades respiratorias, en mujeres en estado de embarazo, lactancia o que se encuentren en su ciclo menstrual.
Tampoco es recomendable para aquellos que sufran de insuficiencia hepática, respiratoria, renal y cardiaca, que padecen de diabetes, cáncer, trastornos de la circulación, epilepsia, problemas de corazón, hígado y riñón, asma o infecciones en la zona a tratar.
Tras la aplicación de la Carboxiterapia y al lograr la meta deseada, los resultados deben ser permanentes, a menos que se hayan generado nuevas cicatrices o estrías durante el tratamiento. En el caso de la celulitis, flacidez y reducción de grasa, se recomienda seguir un programa de ejercicios y dieta saludable para mantener los resultados, de lo contrario, el problema volverá al poco tiempo.
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